Nuestra propuesta consiste en un proceso de autoconocimiento a través del trabajo sobre la imagen personal, porque creemos que para verte bien tienes que sentirte bien. Es algo que todos, sabemos o, al menos, intuimos.
Seguramente, todos hemos experimentado alguna vez, esa sensación de vernos bien con algún conjunto, peinado o complemento, y cómo eso cambió nuestra percepción de nosotros mismos. Al vernos bien, nos sentimos con más seguridad, con más confianza.
Pero también, seguramente todos, habremos experimentado cómo repetir el mismo conjunto en otra ocasión no evoca los mismos sentimientos. O que algún día, sin cambiar nada, los demás nos ven de distinta manera.
¿A qué se debe? ¿Por qué estas experiencias no dependen de nuestra voluntad?
La apariencia personal no sólo tiene que ver con acertar con las prendas y los colores o saber lo que nos favorece, si no y, fundamentalmente, con cómo nos percibimos a nosotros mismos. Lo que proyectamos es el reflejo de la imagen que tenemos de nosotros mismos.
Pero ¿conocemos nuestra propia representación interna? ¿somos conscientes de cuánto y de qué manera nos influye? Explorar esa imagen interna nos ayudará a entendernos, aceptarnos y a sentirnos mejor con nosotros mismos.
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